Metropolitan se pone en forma con el paro

Cuenta Javier Pellón, consejero delegado y copropietario de Metropolitan, que, en una reciente visita a su gimnasio de Vigo, descubrió que la mayoría de los hombres que hacían ejercicio durante el día estaban en paro.

“Tienen más tiempo libre y hacen deporte”, explicó ayer Pellón, al tiempo que señaló que, “los clientes han cambiado: hay más bajas, pero también más altas que hacen más uso de las instalaciones”.

La cadena de gimnasios Metropolitan, propiedad de Pellón y del empresario José Antonio Castro –dueño de Hesperia, por lo que algunos gimnasios se encuentran vinculados a hoteles–, cuenta con una cartera de 45.000 socios. Sus centros están posicionados en un segmento de mercado alto teniendo en cuenta sus servicios, aunque por precio compiten con cadenas asequibles, como la catalana DiR.

Las cuotas de Metropolitan se sitúan en torno a cincuenta euros al mes. Sin embargo, la empresa trabaja con arquitectos de renombre para el diseño de sus gimnasios, como Arata Isozaki o Alonso Balaguer. La última apertura de la compañía, que ocupa parte de la antigua fábrica de Myrurgia, junto a la Sagrada Família, en Barcelona, ha supuesto una inversión de diez millones de euros.

Pellón sostiene que, a pesar de que las cuotas sean reducidas, sus gimnasios consiguen ser rentables porque “se ajustan al máximo los precios de los proveedores”. “No seguimos criterios territoriales ni demográficos a la hora de crecer, sino que buscamos oportunidades –aseguró Sergio Pellón, director general del grupo–; sólo entramos en alquileres o compras que permiten cuadrar el importe final de la inversión”.

Aperturas

El gimnasio de Sagrada Família, que cuenta con una superficie de 8.000 metros cuadrados –2.000 metros cuadrados de los cuales están destinados a actividades acuáticas–, representa el décimoquinto centro de Metropolitan. Entre marzo y abril, la empresa abrirá también en Sevilla y Bilbao, y sumará 80.000 metros cuadrados de superficie en diecisiete ciudades españolas, entre las que figuran también Madrid, Vigo, Zaragoza y Valencia.

“Actualmente hay muchas ofertas para crecer con adquisiciones –explicó Pellón–, pero mantendremos el ritmo de desarrollo que teníamos previsto”. En el mismo sentido opina el director general respecto al crecimiento internacional, aunque añade que existen “oportunidades” de exportar el producto.

Los planes de crecimiento del grupo prevén la apertura de tres nuevos gimnasios a lo largo del ejercicio actual y cuatro más durante 2010. Este desarrollo traerá consigo, según Pellón, un incremento de sus ochocientos empleados, a los que se añadirán doscientos trabajadores más este año. Metropolitan, que cuenta con una trayectoria de veinte años, registró una cifra de negocio de 27 millones de euros el pasado ejercicio y sus planes pasan por alcanzar 45 millones de euros en 2010.

Junto a DiR y Arsenal, Metropolitan es una de las compañías catalanas que opera en el sector de los gimnasios. DiR, presidida por Ramon Canela, cuenta con 81.000 socios y 950 trabajadores. La cadena prepara la apertura de su décimocuarto centro, que estará ubicado en la histórica discoteca Up&Down, en Barcelona. Arsenal, en cambio, es propiedad de la familia Carcas y acaba de abrir su primer gimnasio en Madrid. A estos habría que sumar centros únicos, como Iradier.

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