Siempre va cargada de un sitio a otro con su tabla y su vela. Va y viene como las olas.
La barcelonesa Anna Blanch se dedica profesionalmente al windsurf y vive entre Hawái y Barcelona.
Anna sabe lo que es planear sobre las olas de la mítica playa de Hookipa y a sus 28 años también sabe lo que es ser una de las mejores windsurfistas del planeta.
Tras ser operada de una hernia discal se ha tomado un respiro pero de nuevo ya vuelve a navegar. En busca de las mejores olas y del viento en septiembre cogerá de nuevo sus bártulos y regresará a Hawái, la meca del windsurf.
-¿Cuándo empezó a practicar windsurf?
- A los 13 años. En la Manga del Mar Menor con mi padre y mi hermano.
- Entonces su interés por el windsurf viene desde muy lejos...
- En el Club Natació Barcelona también había un grupo de amigos que navegaba cuando era pequeña y ya me empujaba a practicar windsurf. Lo mismo pasaba cuando veraneaba en la Costa Brava.
-¿Cuándo decidió dedicarse profesionalmente?
- Desde que empecé siempre lo tenía en mente. En casa me dijeron que hasta que no tuviera un título nada. Tan pronto como acabé la carrera de imagen y sonido dije a mi padre que me iba a entrenar. El primer año me fui a Tarifa a vivir a casa de una amiga y ese año ya hacía mi primer campeonato del mundo.
|
(Clica para ampliar) |
- ¿Qué es lo que le enganchó de este deporte?
- Cuando empiezas a planear es una sensación que nunca olvidas y siempre quieres repetir. Además, al ser un deporte que no lo puedes hacer cuando quieras, solo cuando hay las condiciones necesarias, engancha todavía más. Es errónea la concepción de que el windsurf es un deporte lento y aburrido.
-¿En Catalunya hay playas dónde se puede practicar windsurf?
- Hay playas que están bien para practicarlo pero lo que pasa es mar plano y se puede hacer más la modalidad de slalom o freestyle. A mí lo que más me gusta son las olas. En Pals, Castelldefels o Barcelona hay días bonitos con olas pero son días contados.
-¿Qué les pasa a los surfistas y windsurfistas con el nuevo Hotel Vela de Barcelona?
-El hotel ha parado el viento. El Club Natació de Barcelona está justo al lado del hotel y entonces lo que ha hecho es parar un poco el viento. Eso va mal para nosotros porque tienes como 500 metros que la tabla se te hunde y luego cuando llegas afuera y el hotel ya no molesta la tabla te va grande porque has de escoger el tipo de tabla por el tipo de viento.
(...)
Clica para leer la entrevista completa (14-08-2010)