Club Arsenal de la Vía Augusta de Barcelona (Clica para ampliar) |
dissabte, 6 d’agost del 2011
Un gimnasio —el club Arsenal de la Vía Augusta de Barcelona— echa a sus 700 socias
El club Arsenal de Via Augusta decide prescindir de todas sus clientas y será solo masculino a partir de octubre
CLARA BLANCHAR - Barcelona - 02/08/2011
La reconversión del gimnasio se ha producido en paralelo a la desaparición de casi todas las clases dirigidas de yoga, pilates y estiramientos, a las que acudían sobre todo las mujeres, y tras prescindir de la inmensa mayoría de los monitores, una veintena. Piden hablar desde el anonimato -porque trabajan en otros negocios de la competencia y temen represalias, argumentan- y explican que recibieron cartas de despido de un día para otro, sin previo aviso, y a través de burofax. Carcas lo niega, no detalla la cifra de afectados y asegura que se les ha ofrecido trabajar en los otros dos centros. "Despidieron a siete compañeros una semana, a otros siete la siguiente y un número parecido la tercera", asegura una monitora que clarifica que ha sido indemnizada como es preceptivo. "Lo que peor me sabe es que no hablaron con nosotros, nos lo comunicaron con la frialdad de un burofax". No tuvo ni la oportunidad de despedirse de sus alumnas, lamenta.
El propietario explica que la decisión de reorientar el gimnasio "no es económica, sino de organización de la empresa". Arsenal nació con negocios sólo para mujeres u hombres, recuerda, y el mixto, abierto hace cuatro años, no ha dado el resultado esperado. "El femenino de la calle de Amigó es más grande y está muy cerca, dado que en Via Augusta tenemos 1.200 socios y 700 socias, es más lógico prescindir de las mujeres, el perjuicio es menor", argumenta.
En los corrillos de vestuario, explica la socia Cristina R., las usuarias se muestran convencidas de que un gimnasio masculino es más económico para la empresa, por la ausencia de actividades dirigidas. Carcas lo desmiente: "Es más rentable un gimnasio femenino. Las mujeres hacen más deporte colectivo, son más constantes y gastan más", dice y alude a los tratamientos de belleza. Sea como sea, Cristina R. reprocha a los responsables del negocio que no hayan sido más transparentes: "Me he pasado semanas bajando a la recepción a pedir explicaciones, preguntando si era cierto que nos echaban, y me decían que no. Han tardado un mes y medio en decirnos que no nos echan, que nos invitan a ir a Amigó".
Hasta la fecha, la única comunicación oficial que han recibido las 700 socias afectadas se refiere a las obras que han sustituido salas de actividades por un restaurante y un club social. "Quizás sí hemos demorado la comunicación, es porque esperábamos la respuesta a la reducción de clases y las bajas han sido el detonante de la decisión. Lo comunicaremos a finales de agosto o principios de septiembre", concluye Carcas.
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Morositat de Sebastià Millans,
ex-president del Club Natació Barcelona
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2 comentaris:
Bé, amb un cognom com Carcas què caldria esperar?
Eso, carcas es lo que hay en el club natación barcelona, un sitio dirigido por carcas que además estafan, hacen mobing a los empleados y chorizan lo que pueden a los socios.
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